viernes, 24 de noviembre de 2017

INSOLENCIA VIRREINAL

Respuesta a Álvaro Restrepo
(Fiestas de la indepen¿qué?) 


"¿Cartagena se derrumba y los esclavos de rumba?" Así, con esta frase llena de soberbia y descarnadamente racista, el bailarín Alvaro Restrepo da inicio a su diatriba contra las fiestas de Independencia de Cartagena que este 11 de noviembre cumplieron 205 años de celebración popular, en una columna escrita especialmente para el periódico centralista El Tiempo de Bogotá, utilizando un lenguaje excluyente y xenofóbico que ratifica la tara discriminatoria que desde los tiempos coloniales sigue intacta en boca de los cartageneros blancos que exudan soberbia y superioridad y que oculta la lacra histórica del esclavista que ha generado e institucionalizado una sociedad de castas en donde solo las clases privilegiadas tienen derecho al placer y a la diversión mientras el pueblo raso debe trabajar día y noche para ellos. Me pregunto si el Colegio del cuerpo dirigido por el señor Restrepo hace parte de uno de estos eximios espectáculos que según sus palabras permiten a la masa acceder a la exquisita superioridad cultural en la que se sitúa el bailarín. ¿Que pensarían de esta humillación neocolonial el escritor, antropólogo y médico cordobés Manuel Zapata Olivella y su hermana Delia Zapata Olivella gran bailarina y folclorista, ambos grandes defensores de nuestra herencia africana? ¡Cultura o barbarie! parece repetir el afamado director ignorando que las tradiciones ancestrales son la fuente en donde beben todas las músicas y las danzas que permanecen en el tiempo. Olvida que las Fiestas de Independencia de Cartagena no son una feria, ni un bazar, ni una festividad cualquiera como despectivamente el pretende demostrar, sino la celebración de un importante hito que el 11 de noviembre de 1811 partió en dos la historia de la ciudad, de la región Caribe y de Colombia. Un carnaval heredero de los cabildos de negros y los toques de tambores que celebraban desde la colonia los hijos de Chango y Yemaya en la ciudad, junto a los areitos que festejaban la herencia de nuestra familia Caribe, celebraciones que se convirtieron en la gran fiesta popular que hace 205 años celebra el día en que Pedro Romero, acompañado de los lanceros de Getsemaní, lograron no sólo nuestra independencia absoluta de España y de la Nueva Granada sino la libertad de los negros y mulatos de Cartagena convirtiéndolos en ciudadanos libres con derechos, aboliendo así la humillante condición de esclavos impuesta desde Cádiz por Fernando VII y defendida por la Nueva Granada que continuaba fiel a la monarquía española. Una fiesta centenaria que sigue viva y candente a pesar de la invisibilización a la que han querido someterla los cartageneros blancos desde hace más de un siglo, emitiendo normas y decretos que prohibían a "la turba de negros" bailar por las calles de la ciudad con la única intención de ocultar a la Cartagena negra e impedir que "sus movimientos insolentes y atrevidos" perturbaran las buenas costumbres que los blancos cartageneros alentados por el régimen católico e inquisidor que los había satanizado para siempre. Un pecado original que se agiganta de generación en generación, porque no existe blanco que se respete exento de herencias malditas en una ciudad como esta. Si leemos detenidamente la desafortunada columna de Álvaro Restrepo, publicada -para nuestra desgracia- en un periódico centralista y lo analizamos a la luz de los acontecimientos, vemos como después de un siglo la historia se repite. Y que casualidad que sea ahora, cuando las Fiestas están a un paso de ser declaradas Patrimonio cultural e inmaterial de la nación, vemos cómo sus blancos enemigos regresan como vampiros enardecidos tratando de devorarlas de nuevo. Pero lo que más me sorprende, es que las condenas y recriminaciones que utiliza Restrepo para justificar la prohibición del goce y ordenar el inmediato trabajo forzado del esclavo, sigan desconociendo al esclavista que continúa generando la inequidad social, la desigualdad y la injusticia. ¿Será que el director del colegio del cuerpo pretende domesticar el cuerpo rebelde y festivo de nuestra herencia africana, amanerándolo a la medida de la estética nazi que aborrecía lo popular y amaba la perfección, la pureza y el clasicismo que era para los arios la más sublime expresión de la belleza? Olvida Restrepo que el baile es una de las más fuertes expresiones de resistencia de los pueblos. ¡"Alta cultura" o barbarie! parece repetir. ¿Acaso no es barbarie que la clase alta cartagenera haya perpetuado la ley de castas del pasado manteniendo en la miseria y la ignorancia a las poblaciones más vulnerables de la ciudad? ¿Esa es la cultura elitista a la que se refiere? ¿Con qué derecho e insolencia virreinal le ordena al pueblo callar sus cantos, esconder sus pikos, suspender sus bailes y amputar sus tradiciones ordenándoles ejercer un trabajo indigno y ocultando la responsabilidad histórica que tienen los cartageneros blancos en la explotación, la segregación y la criminalización de una población con hambre por culpa de su codicia? Es acaso la búsqueda de la igualdad y la exigencia del cumplimiento de todos sus derechos lo que no pueden soportar? Sigo pensando que mientras escribía su airada columna, el señor Restrepo escuchaba plácidamente las Valkirias de Richard Wagner, mientras afuera, en las calles calientes, la algarabía pikotera cumplía con su champetero ritual de hacer gozar a la gente. Es en esa genuina alegría de los negros en donde radica la violenta rabia de los blancos.

Muriel Angulo 
Cartagena, noviembre 2017


Cabildo de Getsemaní

miércoles, 22 de noviembre de 2017

¡Agua! ¡Agua!"


"Posboceto Crítico I: ¡Agua! ¡Agua!" 

Exposición de la artista investigadora cartagenera y Menina Emputa! Alexa Cuesta Flórez.
Proyecto ganador de la beca 16SRA. Muestras Individuales. Región Caribe.
MINCULTURA 2017

Lugar: Casa Museo Rafael Núñez (frente al Parque Apolo)
Barrio El Cabrero- Cartagena

INAUGURACIÓN COCTEL: 22 NOVIEMBRE 5:00PM

Foto: Jose Sierra



¡APOYEMOS EL ARTE LOCAL!

jueves, 16 de noviembre de 2017

"TENDRÁS QUE MATARME PARA VENCERME"


Propuesta plástica de la artista cartagenera Muriel Angulo que habla sobre la manera en que se construye la noticia en Cartagena y se difunde a través de los periódicos de esta ciudad. 

Un trabajo realizado durante cuatro años a partir de la apropiación de imágenes y textos de la prensa escrita cartagenera y de su archivo personal, intervenidas y deconstruidas por medio del collage, que dejan en evidencia lo que se oculta, invisibiliza, fragmenta, manipula y descontextualiza durante el proceso de fabricación de la noticia, en beneficio de una sociedad blanca, racista, excluyente y hegemónica, que naturaliza la desigualdad, la estigmatización, la discriminación y la criminalización de las poblaciones negras, mulatas y mestizas en contraste con una falsa superioridad del blanco.

Viernes 17 de noviembre de 2017
Conversatorio a las 5 pm.

San Pedro Claver, Sala Coro.
Inauguración después del conversatorio. 


Biografía


Influenciada por el existencialismo, las teorías de Simone de Beauvoir, Mayo del 68 y las revoluciones sociales de la década del sesenta, decido estudiar Periodismo en Bogotá, Colombia. Un tiempo después, ante la necesidad de expresarme desde lugares más cercanos a mi experiencia personal, empiezo mis estudios de Arte en Colombia, New York y México. Mi interés por el tema de las relaciones de poder me lleva a investigar las teorías que Marx, Althusser, Freud y Foucault habían desarrollado sobre los aparatos de control y su injerencia en  la vida cotidiana. Mis investigaciones, textos y trabajos se comportan como dispositivos que hablan de identidad, territorio, sexo, cultura, religión, medios de comunicación, capitalismo y activismo, con la mirada puesta desde lo personal, lo local, lo pequeño, las experiencias, los deseos, las dudas y las contradicciones que han sido invisibilizadas por la cultura de lo uniforme, homogéneo y globalizado. Las micropolíticas se convierten en el eje central de mis proyectos e investigaciones y en la manera oculta y cotidiana de subvertir la norma y hablar de lo que no se habla: acciones de resistencia y materia prima de mi obra. 

Muriel Angulo

Menina Emputá! También hace parte de la membresía activa del colectivo La Redhada.
Más sobre su práctica artística y activismo